Como decía en el post anterior el 2008 estuvo lleno de momentos muy intensos. Consolidé grandes amistades, pude viajar a España invitado por los organizadores del EBE, iniciamos Café de Altura y procedimos a una reinvención genaral de mi negocio, que ya está dando frutos.
El fin de año lo rematé con una reunión con mis compañeros de bachillerato después de 25 años y un placentero viaje con toda mi familia cercana por la sierra norte de Puebla, para pasar el año nuevo en la ciudad de Cuetzalan.
Creo que es un gran augurio de lo bueno que vendrá el próximo año. Te deseo felicidades y mucho éxito.
Seguimos celebrando.